Ir al contenido principal
Procedo entonces a contarles a ustedes mis planes. Se los cuento a ustedes porque ya se los he contado a todos a mi aalrededor y creo que están podridos. Giran en torno a esto: quiero aprovechar mi vida. Quiero hacer muchas cosas y ser exitosa. Es la primera vez que lo explicito (será efecto de expresarlo al escrito), y soy consciente de lo bobo que suena. A mis pocos años ya soy consciente también de mi propia aterradora mortalidad y quiero aprovechar al máximo mi vida: estudiar en el exterior, aprender cosas fascinantes, conocer el mundo, si se puede también hacerlo progresar y emigrar a marte. Creo que ese es el sueño más preciado de mi padre.
Francia sería entonces mi siguiente etapa. Estudiar más especificamente biotecnología en Clermont Ferrand. Y si se puede ir a cuidar peces a Vanuatu y de paso a los elefantes en Kenia, gracias. Y qué bueno que estaría compartirlo todo con ustedes. No duden en financiarme si les entran ganas de ser simpáticos.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Rodríguez - Paco Espínola

RODRÍGUEZ, de Francisco Espínola. Como aquella luna había puesto todo igual, igual que de día, ya desde el medio del Paso, con el agua al estribo, lo vio Rodríguez hecho estatua entre los sauces de la barranca opuesta. Sin dejar de avanzar, bajo el poncho la mano en la pistola por cualquier evento, él le fue observando la negra cabalgadura, el respectivo poncho más que colorado. Al pisar tierra firme e iniciar el trote, el otro, que desplegó una sonrisa, taloneó, se puso también en movimiento... y se le apareó. Desmirriado era el desconocido y muy, muy alto. La barba aguda, renegrida. A los costados de la cara, retorcidos esmeradísimamente, largos mostachos le sobresalían. A Rodríguez le chocó aquel no darse cuenta el hombre de que, con lo flaco que estaba y lo entecado del semblante, tamaña atención a los bigotes no le sentaba. -¿Va para aquellos lados, mozo? -le llegó con melosidad. Con...

La niña de Guatemala o Poema IX - Versos sencillos - José Martí

Martí - Poema IX de "Versos Sencillos" (texto) Poema IX Quiero, a la sombra de una ala, Contar este cuento en flor, La niña de Guatemala La que se murió de amor.  Eran de lirios los ramos, Y las orlas de reseda Y de jazmín: la enterramos En una caja de seda. ...Ella dio al desmemoriado, Una almohadilla de olor, El volvió, volvió casado, Ella se murió de amor. Iban llevándola en andas, Obispos y embajadores, Detrás iba el pueblo en tandas, Todo cargado de flores. ...Ella por volverlo a ver, Salió a verlo al mirador, El volvió con su mujer, Ella se murió de amor. Como de bronce candente, Al beso de despedida, Era su frente la frente, ¡Que más he amado en mi vida! ...Se entró de tarde en el río, La sacó muerta el doctor, Dicen que murió de frío, Yo sé que murió de amor. Allí en la bóveda helada, La pusieron en dos bancos, Besé su mano ...

Soneto XIII - Garcilaso de la Vega

Garcilaso - Soneto XIII - Poesía renacentista SONETO XIII A Dafne ya los brazos le crecían, y en luengos ramos vueltos se mostraba; en verdes hojas vi que se tornaban los cabellos que el oro escurecían. De áspera corteza se cubrían los tiernos miembros, que aún bullendo estaban: los blancos pies en tierra se hincaban, y en torcidas raíces se volvían. Aquel que fue la causa de tal daño, a fuerza de llorar, crecer hacía este árbol que con lágrimas regaba. ¡Oh miserable estado! ¡oh mal tamaño! ¡Que con llorarla crezca cada día la causa y la razón porque lloraba!